El hombre
La estratégica situación
de la sierra del Valle dominando los valles de los ríos Segura y
Guadalentín ha hecho que se sucedan los asentamientos a lo largo del
tiempo, se han encontrado restos de la Edad del Bronce, argáricos,
iberos, romanos, visigodos y árabes. A partir del siglo XV los
asentamientos humanos se acercan progresivamente a los márgenes de los
ríos, sometiéndose la sierra a una sobre explotación de los recursos
forestales, lo que provoca la degradación progresiva del entorno, en
este siglo se emprendieron diversas reforestaciones, lo que ha
contribuido a darle el aspecto boscoso de la actualidad.
Hoy los murcianos lo consideran casi como un parque urbano para su
recreo y esparcimiento.
Complejo arqueológico-arquitectónico de la Luz
El complejo integrado por el Santuario ibérico de la Luz y la iglesia-cenobio de Nuestra Señora de la Luz, las excavaciones confirman la existencia de un templo de inspiración latina, construido entre los siglos III y II a.C. último eslabón de lo que habría sido un importante centro de peregrinación ibera, se han encontrado numerosos exvotos, compuestos en su mayoría por figurillas de bronce de pequeño tamaño.
El abrigo rocoso de la Cueva de la Hiedra constituía la morada de los eremitas fundadores de la congregación de los hermanos de la Luz, en las que permanecieron hasta la construcción de del convento a principios del s. XVIII.